El amoníaco líquido, también conocido como amoníaco anhidro, es un líquido incoloro. El amoníaco, como un importante material químico, es ampliamente utilizado. Para un transporte y almacenamiento conveniente, el amoníaco gaseoso suele ser presurizado o enfriado para obtener amoníaco líquido. El amoníaco líquido es ampliamente utilizado en la industria, y es corrosivo y fácilmente volátil, por lo que su tasa de accidentes químicos es bastante alta.
Densidad de amoníaco líquido:
El amoníaco líquido es un líquido incoloro con un fuerte olor penetrante y se vaporiza fácilmente en amoníaco gaseoso. Densidad 0,617 g/cm3; El punto de ebullición es -33,5 ℃, y por debajo de -77,7 ℃, puede convertirse en un cristal incoloro con un olor desagradable.
El uso de amoníaco líquido:
Principalmente utilizado para la producción de ácido xántico, urea y otros fertilizantes químicos, también puede ser utilizado como materia prima para productos farmacéuticos y pesticidas. Puede ser utilizado como material de amonificación para productos químicos orgánicos y también como refrigerante. El amoníaco líquido también se puede utilizar para el acabado de seda de textiles. Los pares de electrones solitarios en las moléculas de NH3 tienden a formar enlaces de coordinación con otras moléculas o iones, generando diversas formas de complejos de amoníaco.
El amoníaco líquido es un gran disolvente, y debido a la polaridad de sus moléculas y la presencia de enlaces de hidrógeno, comparte muchas propiedades físicas con el agua. Algunos metales reactivos pueden desplazar el hidrógeno y generar hidróxidos a partir del agua, lo que hace menos probable desplazar el hidrógeno en el amoníaco líquido. Pero el amoníaco líquido puede disolver metales para formar una solución azul. Esta solución de metal y amoníaco líquido puede conducir electricidad y descomponerse lentamente para liberar gas de hidrógeno, con una fuerte capacidad reductora.